Aproximadamente nueve de cada diez parejas en edad fértil que mantienen relaciones sexuales regulares consiguen un embarazo durante el primer año. Cuando una pareja, tras un año de relaciones sexuales sin tomar medidas de protección, no ha conseguido un embarazo, se considera que puede tener un problema de esterilidad y precisa la realización de un estudio.
Se estima que en España alrededor de un 17% de parejas sufren la imposibilidad de tener un hijo. Se calcula que 800.000 parejas son infértiles, con una incidencia de 44.000 nuevos casos por año. Y esta tendencia aumenta cada año.
Las causas de esterilidad pueden ser tanto masculinas (35%) como femeninas (35%). Las causas mixtas representan un 20%. A veces, tras el estudio de esterilidad, se observa que no hay causa aparente de infertilidad en ninguno de los cónyuges; es lo que se denomina esterilidad de origen desconocido. Su incidencia es del 10% aproximadamente.
La esterilidad y la infertilidad son dos términos que se emplean indistintamente de manera habitual, pero en el fondo son diferentes. La esterilidad es la incapacidad de conseguir una gestación, mientras que la infertilidad es la incapacidad de llevar a término una gestación. Ambas situaciones tienen solución gracias a las Técnicas de Reproducción Asistida.
La esterilidad es un problema que va en aumento. Las razones que explican este ascenso son fundamentalmente dos: El retraso de la edad en la que la mujer comienza a buscar descendencia provoca una reducción de la tasa de fecundidad. Descenso de la fertilidad masculina. En las últimas décadas se ha observado un descenso muy significativo en cuanto a la cantidad y calidad del esperma. La contaminación ambiental, la dieta, y el estilo de vida más acelerado son las causas principales de este descenso.
En EQUIPO AYUD recomendamos a todas las parejas que no consiguen un embarazo tras UN AÑO de relaciones sexuales regulares sin protección, la realización de un Estudio de Esterilidad.